Realmente este post no es tan interesante, pero no me culpen, estoy en cama con una traqueitis que no me deja respirar dos segundos sin toser otros 15 más.
En esta ocación quiero hablar sobre mi barrio. Vivo en el mismo barrio desde que tengo 4 años, mis padres compraron esta casa en búsqueda de un lugar tranquilo donde sus hijas, y futuro hijo tuvieran una infancia cómoda y tranquila. La cosa es tal vez demasiado tranquila.
Mi barrio es un lugar viejo, con casas viejas, parques pequeñitos donde está prohibido jugar porque se pueden romper vidrios ajenos, las casas son habitadas usualmente por las personas que las compraron nuevas hace más de 50 años. Son en gran parte pensionados, desde que tengo memoria. Es un lugar atemporal que no se renueva... es un lugar donde los "jóvenes" eran 15 años mayores que yo, donde las señoras salían por la ventana a pedir que hicieramos silencio, donde los hijos emigraron hace rato y se casaron. Solo quedan los padres, pensionados, que barren el frente 5 veces al día, porque no hay mayor cosa que hacer.
Yo fuí una sin amigos... porque en mi barrio no había niños.
Por eso mismo, a pesar de que mi colegio era una chanda, las horas de juego se me hacían muy cortas, y tuve muchos amigos, tal vez intentando reemplazar los que nunca tuve en mi barrio.
Por eso mismo, a pesar de ser 4 años mayores que yo, mis hermanas reemplazaron esas amigas de jugar a las muñecas, al restaurante, a la peluquería...
Por eso mismo me acostumbré a hacer tareas temprano... porque no había motivos para salir al parque, a menos que uno quisiera salir regañado por alguna solterona que iba a mirar el cielo...
El tiempo ha pasado; ahora salgo para mi trabajo y siempre saludo a la señora del frente que pasea al poodle blanco y el schnauzer negrito que me ladra (¿cuántos años tendrán esos perritos ya?). Ya no hay señoras regañonas, sino viejitas que me saludan y le mandan saludos a mi mamá.
El barrio no ha cambiado mucho, las casas igual, los parques igual, lo que me da tristeza es que algunos viejitos ya han muerto, y las casas han sido compradas por empresas que montan oficinas discretas y sin letrero... No es que me incomode, pero se va perdiendo esa visión de infancia, los olores característicos del medio día, y no hubo un relevo generacional. El barrio va dejando de ser un espacio personal, y se va volviendo un aburrido sector empresarial.
Caníbales
Hace 5 años
15 comentarios:
La sentencia: "este post no es tan interesante", me parece desacertada. El post es lo contrario: muy interesante y lo es porque todos aquellos que hemos crecido o hemos pasado parte de nuestra vida en un mismo lugar, hemos sido testigos de la mutación de la ciudad y de la metamorfosis de sus gentes.
Algunos barrios se han envejecido junto con sus habitantes y otros han sufrido una exagerada cirugía arquitectónica que ahora los muestra con sus caras de asfalto potencializando con lo más exuberante del modernismo del tercer mundo, es decir, la casa seudorepúblicana a punto de caer, junto al edificio tipo “caja de leche” con ventanas de espejo y la bodega de reciclaje. Cada barrio es un reflejo de quienes lo habitan y aunque ahora muchos se visten de luces comerciales y abolengos empresariales, aún quedan unos cuantos que albergan las miradas enternecidas de esas viejecitas que envían saludes a la mamá de la hermosa doctora que recorre sus calles cada mañana, esa misma doctora que saluda a la señora del frente que pasea al poodle blanco y el schnauzer negrito que le ladra, la misma que escribe y que encanta con cada palabra.
Hum... en Bogotá hay muchos barrios por el estilo, así que es dificil adivinar cuál de todos es...
Es una lástima esto de las oficinas, pero ahora está más "in" vivir en un apartamento miniatura o comprar una casa en las afueras, las casas grandes en los barrios viejos requieren muchos cuidados que pocos están dispuestos a llevar a cabo, a fin de cuentas, la cultura de la casa propia y el amor por lo que es de uno se fue trasnformando por la cultura de lo desechable sin que nos dieramos cuenta.
Afortunadamente nuestros padres aún nos han inculcado a algunos el amor por estas cosas. En el fondo es una de las cosas más valiosas que me ha dejado crecer de la mano de un joven viejo como mi papá.
Primero que todo Doctora cuidate y ojala te recuperes pronto.
Lo de los barrios que se envejecen pasa en todos lados, los niños crecen y se van a otros lados y sus padres que luego son abuelos se quedan en las mismas casas y de repente todo el barrio envejece junto, esperando que vuelvan los nietos para rejuvenecer las calles
Hola a todos.
Sr. Gabriel: Gracias por sacar mi post del grupo de los sosos jejeje, en verdad tiene usted tiene mucha razón, el afán de nuestra sociedad de crecer económicamente olvida ese sabor caracteristico a hogar que poseen o poseían nuestros barrios, que lástima que sea un fenómeno arrasador y difícil de detener :( Un abrazo.
Srita Quime: Toda la razón, la gente ya no se le mide al gallo de andar reparando cada cosita que se le cae a la casa, y pues los unicos dispuestos a comprar estos "elefantes" son los empresarios, que evitan pagar impuestos por no poner letreros. Chevere que su papá le haya enseñado ese amor, sé como se siente y es bonito.
Sr. Alquimista: Gracias miles, ahi voy recuperandome, así como usted dice, se quedan esperando a esos nieticos, porque las casas son grandes y los viejos se van quedando solos. Si hicieramos una radiografía de mi barrio, se vería eso, grandes habitaciones solas, por donde corren solo recuerdos de los hijos idos.
Bastante melancólico el post Doc,
las casas de los barrios tradicionales están convirtiéndose en oficinas todas X o almacenes y se tiran el carácter residencial que tenía el barrio, eso gracias al auge de los conjuntos cerrados me imagino, por eso nadie quiere comprar una casa de esas para ver crecer a sus hijos allí. aunque todavía quedan algunos pocos que se rehusan a ello. que bueno!
PD: Si le sirve de consuelo, yo también fuí una "sin amigos" solo que no tengo hermanos y el barrio no era el mejor...
Saludos Doc y que se recupere prontito!
Hola dra. No sé si será una fijación pero cuando dicen barrio pienso en Modelia o en Fontibón.
Me da gusto saber que hay gente sedentaria. Yo, El Peregrino, no crecí en ninguna parte y sí en todas. Este ejercicio del reconocimiento que vd. hace se me escapa y, sin embargo, me parece hermosísimo.
Estoy de acuerdo con Gabriel Umaña, el post es muy interesante. Pasa a veces: lo que nos gusta no gusta; lo que no nos gusta, gusta.
Saludos.
Mira, que te digo... pos si esta como interesante la entrada, me hace recordar muchas cosas, ya que mi infancia la viví en Bogotá y pos ahora ya no estoy por allá, mi familia inmediata, es decir mis padres y hermanos, no han sido de vivir mucho tiempo en un solo sitio, así que no podría compartir la sensación que tienes... Saludos!!
Hola todos:
Srita. Nightwriter: La inseguridad ha aportado mucho a que el barrio abierto como tal se vaya perdiendo. En verdad hay un toque de melancolía, tal vez por la infancia, tal vez por el barrio... quien sabe. Jejeje salud por los sin amigos!!! hay que brindar por ello. Muchas gracias querida mia, ya me voy sintiendo mejor.
Sr. Peregrino: Muchas gracias, realmente creí que no era muy interesante hablar de ello, pero es algo que me nace, pues es el lugar de donde provengo, donde están mis recuerdos. Tambien sería muy interesante que ud comentara como es la vida nómada. Un fuerte abrazo.
Sr. Gurzaf: Hasta que edad vivió en Bogotá? si le gustó o no?? La verdad creo que ya muy poca gente puede compartir lo que yo, porque por diferentes circunstancias se mudan varias veces. Pero como le decía al Peregrino, es interesante también esa vida nómada, conocer tantos lugares y personas da para llenar miles de páginas. Un abrazo.
Yo viví en bogotá como hasta los 11 años, luego pos termine por acá en el Valle del Cauca, Bogotá me gustó mucho y a veces me gustaría nuevamente vivir por allá, pero todo pasa por algo y ahora me toca por aquí. Saludos!
Gúenas para lo de comentar, suerte Doc que dio con un buen barrio a uno si le toco en el profundo y oscuro sur, donde después de las 11 llegar era un deporte de alto riesgo, allí el relevo generacional es casi a diario, niñas de 15 ya están en esas labores y ni hablar de la cantidad de perros por todos lados, jejeje me hizo recordar el mío, buena inspiración para una entrada.
4 besos.
Si buenas...
Sr. Gurzaf: Cuando venga me visita, pero ojo, sin falta, lo interesante es que su mundo es mucho más amplio, porque ha visto más cosas. Un abrazo.
Sr. Yara: Pues ala que le digo, mi barrio es mas bien tranquilo, pero colinda con uno que es igualito a lo que ud dice, hay un callejon puñalero cada dos cuadras, y muchos chuzos de rockola y pola. Esperaré esa entrada con ansia.
Besos y abrazos!
El barrio cuenta la historia de quienes lo habitan. Sus calles hablan en silencio de lo que se vive allí. Sus casas, sus muros, sus perros, evidencian el paso del hombre, de la mujer. El modernismo, nos cogió con los calzones abajo y nos abrochó con el desorden de una arquitectura al servicio del comercio, convirtiendo la ciudad en un carnaval de ofertas, promociones, megáfonos, precios bajos, page uno lleve dos, todo a mil, el de moda, qué está buscando mi amor, le tengo el yin, delicioso almuerzo... en fin, y nuestros viejos envejecen con las casas y los barrios se transforman y pierden ese encanto de pueblo pequeño, de aldea... Me encanta tu mundo rosa metal.
Pd. Gracias por pasarte por el blog y plasmar tus letras, eso da razón a mi vivir y me libra de la inexistencia. Te busco entre nubes.
Que envidia tan grande Doctora, haber vivido toda la infancia y adolescencia en la misma casa, la estabilidad, la tranquilidad y todas las ventajas emocionales que da la estabilidad de vivir en un mismo sitio durante tanto tiempo.
Yo fui realmente desafortunada, bueno toda mi horrible infancia fue desafortunada, sin mentir creo que me he trasteado diez veces en mis 25 años y aun mi inestable madre insiste trastearnos otra vez? He conocido toda clase de barrios desde nuevos hasta viejos, pasando por pobres y gomelos y normales.
Sauldo y que se mejore pronto.
Hola hola!
Sr. Caballero: es cierto, tal vez mi barrio fué como una pequeña aldea de silencio y protección, esa burbuja que se ha roto con tanta oficina y mensajeros en moto. Es una lástima. Ah si y no hay nada que agradecer, es un placer leerte.
Srita Rojo y Gris: Pues hay cosas que son afortunadas y otras no tanto. Vivir en el mismo sitio tiene desventajas también, de todas formas comparto su desprecio por tanto trasteo, siempre se dañan cosas y se pierden otras, pero como ya he dicho, también le abre los ojos a uno y amplía la visión del mundo... cosa que no viví cuando tocó.
Publicar un comentario